los vecinos denunciaron olores y descubrieron un cadáver en una vivienda. Alertados por el olor nauseabundo del cadáver en descomposición, los lugareños dieron aviso a la Policía. El hombre, de 62 años, fue identificado como Antón Ríos.
El individuo fue identificado como Antón Ríos Arce de 70 años, de nacionalidad paraguaya. En la parte trasera del mismo terreno se detectó que vive la ex del difunto F.G. de 62, quien informó a la Policía que desde el viernes en horas de la tarde que su ex no salía de la casa.
El misterioso hecho ocurrió el domingo en Quitilipi, cuando vecinos del barrio Macarena convocaron a la Policía porque había un hombre muerto hace varios días en una vivienda precaria. Vecinos y familiares se dieron cuenta por el olor putrefacto que salía de la morada.
Una comisión policial se hizo presente después del mediodía logrando entrevistarse con un hombre de 62 años, jubilado quien guió a los efectivos hasta una precaria vivienda donde se hallaba una persona de sexo masculino, reposando en estado cúbito dorsal. El cuerpo estaba en una cama de una plaza aparentemente sin signos vitales.
Posteriormente, se hizo presente personal médico del hospital de Quitilipi que, tras examinar el cuerpo, informó que se hallaba en estado de descomposición y sugirió ser examinado por un médico forense.
Personal policial labró las actas correspondientes, se informó a la Fiscalía de Investigaciones 1, a cargo de la doctora Liliana Graciela Lupi, quien dispuso que el cuerpo sea trasladado a la Morgue Judicial de Presidencia Roque Sáenz Peña. Además, intervino personal del Gabinete Científico del Poder Judicial, a cargo de Edgar Galussi, quien realizó tareas periciales y tomas fotográficas del lugar. Luego, el occiso fue trasladado en el móvil tanatológico de la División Bomberos de Sáenz Peña hasta la morgue de la vecina ciudad.