El trágico hecho ocurrió el viernes en la localidad correntina de Goya. Los animales se encontraban pastando en un campo cuando el aparato hizo un estruendo provocando la caída de un cable de alta tensión, lo que generó el deceso de los mismos.
La familia Saucedo, propietaria del campo en el que ocurrió el suceso, fue la que alertó a la policía sobre lo ocurrido. Todo pasó a 50 kilómetros de la ciudad, en una zona que se conoce como San Isidro al Bajo.
Una vez llegadas las fuerzas de seguridad al lugar se procedió a delimitar la zona de riesgo, ya que el cable continuaba suelto y seguía teniendo electricidad. Posteriormente, se decidió cortar el servicio de energía eléctrica en los alrededores para poder retirar los cuerpos y solucionar el cable suelto.
