Son personas que desempeñan sus tareas en una textil ubicada en Avenida Independencia al 4900 de la capital provincial. El dueño de la empresa sancionó por 30 días a los empleados, tras una protesta pacífica que hicieron fuera del recinto.
Un total de 104 trabajadores viven por estas horas una situación complicada en la Ciudad de Corrientes. Se debe a la inseguridad que tienen por sus puestos de trabajo en una textil dirigida por Damar Group S.A, que compró el emprendimiento a un empresario identificado como Raúl Alasia.
Esta inquietud de los trabajadores se da en el marco de una suspensión que sufrieron luego de realizar una protesta pacífica afuera de las instalaciones, en Avenida Independencia al 4900. Por esa decisión, a la que tienen total derecho, fueron notificados de una sanción que les imposibilitaba asistir a la fábrica y hacer sus trabajos.
Se pudo saber recientemente que los empleados buscaron dialogar y llegar a una solución con los directivos de la firma, pero no hubo predisposición por parte de los empleadores. A raíz de dicha situación, decidieron contratar un abogado y pidieron también el apoyo del Ministerio de Trabajo.
“Nos vienen pagando de a puchito, de a 900 pesos, quien puede vivir con eso, quien puede mantener a una familia”, sentenció Silvia Galarza, una de las trabajadoras.