El dramático hecho sucedió ayer en la localidad de Mburucuyá, donde la niña de 12 años entró junto a su hermano a un predio en el que se cultivan cítricos. Al parecer, la fruta que comió tenía pesticidas y minutos después de ingerirla sufrió un paro cardiorespiratorio. La llevaron al hospital de Saladas, pero llegó sin vida.
El caso conmocionó a toda la provincia durante las últimas horas y, de seguro, las acciones relacionadas al mismo seguirán de manera rigurosa por estos días.
En ese sentido, fuentes policiales brindaron los detalles confirmados hasta el momento: «la niña junto a un hermanito, ingresaron a un predio donde hay plantaciones de cítricos, para comer mandarinas. Aparentemente la menor comió una fruta rociada con algún pesticida contra plagas», indicó un efectivo a medios locales.
Además adelantaron posibles allanamientos en el lugar para determinar las causas de la muerte.