El candidato de la ultra derecha brasileña consiguió hasta el momento un 47% con un total de 87,91% de mesas escrutadas en el vecino país. En segundo lugar, pero muy lejos, se ubicó el elegido por Lula Da Silva, Fernando Hadad del Partido de los Trabajadores.
En los comicios de hoy quedó demostrado que gran parte de los habitantes de Brasil perdieron la confianza en las ideas políticas y proyectos de país que tuvieron los referentes Lula Da Silva y Dilma Rousseff.
El candidato del PT, Fernando Hadad, reemplazó al ex presidente -hoy preso- que le dio su bendición. Pero eso no alcanzó para ganarle a Jair Bolsonaro, ex militar, reconocido opositor a los derechos de la diversidad sexual y miembro de la extrema derecha.
Con casi la totalidad de mesas escrutadas, el hombre que hace poco fue apuñalado durante un acto de campaña obtuvo 47% de los votos; seguido por Hadad a 20 puntos de distancia y luego el resto.
De todas formas, Bolsonaro tendrá que competir en segunda vuelta porque los números no le alcanzan para convertirse en el nuevo presidente. Lo que sí es un hecho es el avance de un sector político totalmente enemistado con las minorías de género, las minorías raciales y varios sectores del arco trabajador.