Eugenia Rodas, de 79 años de edad, y Miguel Florentín de 75 años, pasan por una difícil situación en Punta Taitalo. Pasan sus días en una casilla que no les permite vivir dignamente y que tampoco los protege del frío.
Ambos están ubicados en un sector conocido como ‘el obraje de Moncho Vila’.
Por si todo eso no fuera ya un golpe devastador, anoche sufrieron el accionar de delincuentes que podrían definirse como rateros por su poca noción de los códigos que hasta en ese mundo del hampa tienen sus integrantes.
“Con nuestros hijos y otros familiares no nos llevamos bien”, dijo la pareja y por eso viven solos.
Quienes deseen colaborar con lo que puedan, deben comunicarse con el celular 379 4 085399.
Primero que nada necesitan chapas para reforzar el techo de la casilla.