Lo confirmó el director del nosocomio de Paso de la Patria, donde el fin de semana se realizó la tradicional fiesta de pesca. Muchos de los hospitalizados eran menores.
Claudio Martínez Borda, doctor titular del hospital, pidió “prudencia” a través de su cuenta de Facebook días atrás.
La razón fue clara: ya desde el viernes, gran cantidad de jóvenes llegaron al hospital, lesionados por accidentes con motos o por estado de ebriedad y drogas.
“Sólo viernes hubo 4 accidentes. Dos pacientes derivadas Corrientes por fracturas, todos involucrados motos y también ingresaron muchos joven en estado de ebriedad”, dijo el médico a medios locales y también lamentó que “no disfrutan de lo que es la esencia de la Fiesta, que es la pesca”.
Asimismo, agregó: “la situación no está cambiando, hay muchos jóvenes ebrios y muchos son menores”.
Con esa frase se puede afirmar algo. Si en todo el último tiempo nada cambió, significa que ni los padres ni el Gobierno tomó las medidas necesarias para evitar una problemática como la que se vivió el fin de semana. Tampoco lo hacen ahora, y tienen el mismo grado de responsabilidad.
El ciudadano común termina rehén de los malos comportamientos, pero también de la mala educación y peores políticas de Estado o medidas de prevención y acción.