El personal del hospital Perrando recibió en la madrugada de Navidad a 21 personas accidentadas, 8 con intoxicación alcohólica, seis pacientes heridos de arma blanca y tres quemaduras oculares una de ellas con estallido ocular por pirotecnia. En tanto que un herido de arma de fuego, más una persona con un traumatismo de cráneo grave, son los pacientes de mayor preocupación.
En la estadística que proporcionó el médico Sergio Mora, especializado en terapia intensiva, se registró además un intento de suicidio y por consultorio externo hubo unas 12 consultas.
