TN24, tuvo acceso a un proyecto de Resolución del Concejal del Frente Chaqueño, Fabricio Bolatti, por el cual se solicita al Ejecutivo Municipal de Resistencia, que en el marco de sus responsabilidades, arbitre los medios necesarios para incluir en la Campaña de Vacunación Provincial contra el Covid-19, al personal afectado a las áreas esenciales del Municipio.
Los trabajadores de inspectorías de Habilitación, Fiscalización y Control de Seguridad, de Salubridad e Higiene; Servicio de Limpieza y Recolección de Residuos, fueron declarados a través de la Ordenanza N° 13.371 – la cual fuera elevada por el propio intendente Gustavo Martínez- como “esenciales”, ya que desempeñan tareas necesarias e indispensables para el control y debido cumplimiento de las normas de salubridad, higiene y seguridad.
En ese marco, se considera indispensable que los trabajadores que se desempeñan en tales áreas sean incluidos dentro la población objetivo, teniendo en cuenta el riesgo que los mismos enfrentan a diario en el cumplimiento de sus tareas, ante la singularidad del virus y la situación de emergencia que se atraviesa a nivel mundial por la pandemia.
Cabe mencionar, que en la provincia del Chaco, han sido vacunados el personal de salud pública y privada; personal de las Fuerzas de Seguridad provincial y federal; se inició la vacunación de adultos mayores; trabajadores docentes y no docentes; han recibido la vacuna personal considerado «estratégico» en el Insssep; la próxima semana se dará inicio a la inoculación del Poder Judicial; pero los trabajadores municipales declarados esenciales, y que están expuestos a diario al virus, no han sido incluidos en la campaña, y no vemos preocupación ni iniciativa por parte del intendente en resguardar la salud del personal.
Desde el inicio de la pandemia, los vecinos de Resistencia se vieron ‘abandonados a su suerte’ en lo que respecta a la articulación de políticas y acciones destinadas a contener y enfrentar la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus por parte de Martínez; y los trabajadores no fueron ni son la excepción.
La dinámica de la pandemia significa un serio riesgo a toda la población y requiere la adopción de medidas urgentes, que tiendan a poner fin a su propagación y a mantener los servicios esenciales.
El Intendente, en su calidad de máxima figura política de la ciudad, tiene la obligación de velar por la salud y bienestar de sus trabajadores, quienes diariamente salen a la calle poniendo en riesgo sus vidas y las de sus familias.
Pero una vez más, el Jefe comunal brilla por su ausencia en temas que son prioridad, dejando desprotegidas a las personas que en silencio mantienen a la ciudad en las condiciones de salubridad necesarias.
