La encargada no poseía habilitación y ninguna documentación del producto.
A las 20 de este martes, los agentes de la Comisaría Pampa Almirón llegaron hasta una carnicería ubicada en el barrio Santa Lucia de esa localidad, luego de un llamado donde informaban que estaban vendiendo carne de dudosa procedencia.
Seguidamente los policías se entrevistaron con la propietaria de la carnicería una mujer de 65 años, a quien le solicitaron la documentación del producto que estaba vendiendo. La mujer manifestó no poseer ninguna documentación y tampoco habilitación del municipio.
Por este motivo, secuestraron 119 kilos de carne vacuna, que fueron examinados por el veterinario de la Rural que adujo que el producto no se encontraba apto para el consumo humano ya que se desconocía el lugar y elementos de la faena, como así también el estado sanitario del animal.
Finalmente, la carne fue incinerada y la mujer fue notificada de la Supuesta Infracción al Artículo 44 y 45 (Faena Clandestina) de la Ley 850-J.
