Resistencia es una de las peores ciudades para transitar, por diferentes factores que confluyen para que esto suceda. Y uno de esos factores es la falta de controles de tránsito en lo que compete al municipio que conduce Gustavo Martínez.
El siniestro vial del pasado lunes por la madrugada, donde padre e hijo fallecieron en un siniestro completamente evitable, fue el detonante para que la provincia decida inmiscuirse y colabore para poner freno a tanto descontrol.
Según informó la provincia, desde el Gobierno se puso a disposición la Policía Caminera para llevar adelante tareas de prevención de siniestros viales que ocurren en las principales avenidas de la ciudad, así como también ante la aparición de las llamadas “picadas” o carreras de motos que se realizan también en las avenidas en horarios nocturnos durante los fines de semana.
En ese contexto, el subsecretario de Seguridad Vial de la provincia, Juan Basail mantuvo un encuentro de trabajo con directores de Policía Caminera, inspectores de Tránsito del Municipio de Resistencia y el subsecretario de Tránsito y Seguridad Ciudadana, Matías Breard para coordinar los operativos de control de tránsito que se realizarán a partir de este fin de semana en la capital chaqueña.
Basail aseguró que hay preocupación por lo ocurrido los últimos fines de semana en los que, en siniestros viales ocurridos en horas de la noche, hubo que lamentar víctimas fatales, entre ellas, un niño de 2 años. Por eso, “ofrecí los recursos y el acompañamiento necesario para que el Municipio de Resistencia pueda fortalecer el trabajo que realiza en las calles de la capital chaqueña en materia de seguridad vial”, dijo.
Durante el encuentro con inspectores de Tránsito, junto al Área de Control Acústico y Policía Caminera, se acordó que equipos integrados por dichas áreas se apostarán en distintos puntos de Resistencia para realizar controles de alcoholemia, documentación y elementos de seguridad.
Todos los operativos están enfocados en evitar que los motociclistas realicen prácticas peligrosas en la vía pública, se pongan en peligro y pongan en peligro a terceros. Esto implica que, si cualquier vehículo incumple con las normativas de tránsito vigente, no tiene documentación o elementos de seguridad para conducir, el Municipio podrá remover el vehículo.