La Fiscal N°1 de Sáenz Peña, Liliana Lupi, a cargo de la investigación de la muerte de la joven Jaqueline Romero, reveló que de la autopsia practicada al cuerpo el viernes, surgió la existencia de dos heridas de arma blanca, de tamaño pequeño y profundas, ubicadas en el cuello.
Si bien aclaró que todavía no dispone del informe escrito de la autopsia, esos datos surgen de una comunicación dada en forma telefónica por el forense que practicó la autopsia.
“No se descarta que, después de haber sido provocadas esas heridas, haya habido algún mecanismo de estrangulación”, agregó Lupi, resaltando asimismo que todos esos detalles recién podrán ser confirmados cuando el Instituto de Medicina y Ciencias Forenses (IMCiF) envíe a su fiscalía los resultados de las muestras de anatomía patológica.
En esa línea, recordó que, al realizarse una autopsia a un cuerpo, se extraen distintas muestras de órganos de la víctima, las que luego son analizadas. En este caso, esas muestras fueron trasladadas desde Sáenz Peña a Resistencia, bajo un estricto protocolo.
Frente a esos datos arrojados por la autopsia, la hipótesis central del caso sigue siendo el femicidio. De hecho, el único detenido en la causa es el novio de la joven, Rodrigo Nicolás Chávez.