La Municipalidad de Resistencia propone ceder un valioso terreno al Poder Judicial en comodato por 50 años, lo que ha desatado cuestionamientos de la oposición y del sector vecinal por la falta de consulta y las necesidades de oficinas municipales.
La Municipalidad de Resistencia ha presentado un proyecto de ordenanza para ceder un terreno de alto valor inmobiliario al Poder Judicial, en una ubicación estratégica sobre la avenida Las Heras. La propuesta, que plantea un comodato por 50 años y una posterior transferencia gratuita, ha generado controversia, especialmente en medio de las críticas de la oposición y los reclamos vecinales por la falta de espacios para oficinas municipales.
El terreno, de 1.340 metros cuadrados y valuado en aproximadamente 1.000 millones de pesos, es considerado una zona clave dentro del microcentro de la ciudad. Sin embargo, el concejal Guillermo Monzón, en representación de la oposición, rechazó la iniciativa. Según Monzón, la cesión no solo carece de consulta con los trabajadores municipales que operan en el predio, sino que también se aleja de un plan de descentralización de oficinas municipales que buscaba mejorar la atención a los ciudadanos.
“El terreno podría beneficiar el funcionamiento de las oficinas municipales y mejorar las condiciones laborales de los empleados. Es un predio que debería utilizarse para centralizar varias oficinas y optimizar los servicios a la comunidad», explicó Monzón. Además, criticó la discrepancia con las políticas aplicadas a las familias locales, muchas de las cuales han tenido que pagar terrenos en cuotas de hasta 30 años, mientras que ahora se pretende regalar un terreno al Poder Judicial.
Otro punto de controversia son los trabajadores que actualmente ocupan el predio, quienes, según Monzón, no han sido notificados sobre su futuro. «Los empleados se enteraron por nuestras visitas al lugar, y no hay claridad sobre su reubicación ni sobre las condiciones laborales», señaló el concejal.
Monzón también cuestionó la falta de planificación en el uso del terreno, especialmente dado el gasto que realiza la municipalidad en alquileres para oficinas. «No es momento de desprendernos de un terreno valuado en más de mil millones de pesos sin una planificación adecuada», enfatizó, sugiriendo que la decisión podría tener motivaciones políticas.
La propuesta aún está en proceso de evaluación por parte del Concejo Municipal y debe ser aprobada antes de su implementación. Sin embargo, las críticas continúan intensificando el debate sobre cómo gestionar el patrimonio público y cómo equilibrar las necesidades de la ciudad en términos de infraestructura y acceso a la tierra.
