La embarcación, sobrecargada y sin medidas de seguridad, quedó atrapada entre las rocas. Prefectura y lanchas particulares lograron un rescate in extremis.
El río Paraná fue escenario de una escena de pánico en la mañana del martes cuando un barco de bandera paraguaya, con más de 50 personas a bordo, quedó a la deriva y comenzó a chocar contra las rocas. La embarcación, que hacía el recorrido entre Paraguay y la localidad correntina de Itatí, se encontraba sobrecargada y sin medidas mínimas de seguridad, lo que agravó el riesgo para sus ocupantes.
Según testigos, el agua estaba tranquila al momento del incidente, pero la falta de control sobre la nave la dejó sin dirección en medio del cauce. Desde la costa, se escuchaban los desesperados gritos de auxilio de pasajeros, entre ellos mujeres, niños y adultos mayores, quienes quedaron completamente expuestos.
La Prefectura Naval Argentina intervino de inmediato, con una lancha que logró remolcar la embarcación hasta el puerto. Varias lanchas particulares de la zona también participaron del rescate, sumándose a la emergencia para evitar una tragedia.
“Fue un momento de horror. Pensábamos que se hundía”, relató uno de los sobrevivientes al llegar a tierra firme.
El episodio reaviva la preocupación sobre la falta de controles en embarcaciones de transporte de pasajeros en la región. Autoridades analizan posibles sanciones para los responsables del navío, mientras los pasajeros intentan reponerse del susto.
