Una joven denunció haber sido víctima de estafa, coacción y violencia en el barrio La Ilusión, en un caso que ya investiga la Justicia chaqueña.
Lo que comenzó como un acuerdo para acceder a la casa propia se convirtió en un drama con ribetes judiciales, sanitarios y personales. Una mujer de 24 años denunció que fue víctima de un complejo entramado de engaños, amenazas y violencia física luego de intentar comprar una vivienda en el barrio La Ilusión, al sur de Resistencia.
La pesadilla comenzó en 2023, cuando acordó con dos hombres de apellido Cáceres la compra de una vivienda por 14 millones de pesos. Entregó dos millones como anticipo y comenzó a pagar cuotas mensuales, pero jamás recibió documentación que avalara la operación. En noviembre, un allanamiento del Equipo Fiscal N.º 15, en una causa por usurpación, reveló que la propiedad tenía un estatus irregular.
Tras recibir asistencia de Desarrollo Territorial, la joven suspendió los pagos y se gestionó a su favor el Registro Único de Beneficiarios del Hábitat (RUBH). Sin embargo, esto desató una escalada de hostigamientos por parte de los presuntos vendedores. En enero, debió ser internada de urgencia por complicaciones en su embarazo derivadas del estrés. Los médicos indicaron una cesárea anticipada por sufrimiento fetal.
La violencia no terminó allí. En las últimas semanas, una vecina —presunta pariente de los Cáceres— la hostigó con insultos y presiones para que abandone la casa. El martes por la noche, la agredió brutalmente en plena calle. Otros vecinos intervinieron y lograron frenar la golpiza. Un médico policial confirmó lesiones recientes compatibles con la agresión.
La fiscal Candela Valdez dispuso la apertura de dos causas: una por lesiones y amenazas, y otra por coacción y estafa. La agresora fue detenida y uno de los Cáceres ya fue notificado de la investigación. La historia de una promesa de hogar terminó en un doloroso proceso legal y físico que aún no encuentra resolución.
