Está ubicada en el parque industrial de Sáenz Peña y es una de las tres plantas de este tipo en todo el mundo. El gobernador Zdero destacó la iniciativa como un modelo de producción sustentable con potencial exportador.
El gobernador Leandro Zdero encabezó este lunes la inauguración de la fábrica «Heffner Oil», la primera planta de producción de aceite esencial de palo santo de la Argentina y la tercera en el mundo. La industria, radicada en el parque industrial de Presidencia Roque Sáenz Peña, tendrá una capacidad de elaboración mensual de seis toneladas y proyecta insertarse en mercados internacionales bajo certificaciones ambientales.
“Esto es gracias al trabajo, la pasión, la dedicación y la investigación de Waldo Heffner, que desde hace más de 20 años viene desarrollando este proyecto. Hoy, con base en el Parque Industrial, está produciendo desde la sustentabilidad un producto netamente chaqueño”, expresó Zdero durante el acto, acompañado por el ministro de Producción, Oscar Dudik, y el intendente local, Bruno Cipolini.
El mandatario resaltó la importancia de fomentar la inversión privada: “Debemos transformar nuestra provincia y dejar de conformarnos con lo que recibimos. Tenemos la posibilidad de generar mano de obra incentivando al sector privado”. En ese sentido, destacó las medidas de promoción industrial que incluyen la exención del pago de Ingresos Brutos por un año para nuevas industrias, y una reducción progresiva de la carga impositiva provincial.
La tecnología aplicada en Heffner Oil se basa en un desarrollo ingenieril propio, que emplea técnicas de destilación por arrastre de vapor y purificación por deshidratación al vacío. Este sistema permite obtener aceites esenciales de alta pureza y con valor agregado. Toda la materia prima es trazable y cumple con los más altos estándares ambientales.
Para su comercialización internacional, el producto debe contar con la certificación CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres), además de la validación del Ministerio de Ambiente de la Nación y la Dirección de Bosques del Chaco, que garantizan una extracción no perjudicial para el ecosistema.
Waldo Heffner, impulsor del emprendimiento, valoró la articulación entre tecnología, sustentabilidad y producción local: “El palo santo es parte de nuestra identidad y hoy podemos mostrarlo al mundo con un producto trazable, certificado y de altísima calidad”.
