Hasta el sábado a la mañana (hora Argentina), el país persa ejecutó cuatro oleadas con misiles hacia Tel Aviv y causó daños significativos, en respuesta al ataque del jueves perpetrado por Israel para desarticular instalaciones nucleares iraníes. La gestión de Netanyahu promete más bombardeos.
En el marco de la violenta escalada bélica entre las dos potencias de Medio Oriente, y con la sorprendente efectividad del contraataque iraní a Tel Aviv, en Israel adelantaron que habrá consecuencias graves en el territorio que gobierna el ayatolá Ali Jamenei.
Israel Katz, ministro de Defensa del Gobierno israelí, confirmó en las últimas horas mediante un comunicado que «Teherán arderá» y llamó al pueblo iraní a rebelarse contra sus líderes.
Además, desde el Gobierno estadounidense que comanda Donald Trump, exigieron a Irán que desista de aumentar el desarrollo nuclear porque, de lo contrario, «lo peor está por venir».