El proyecto fue presentado por el diputado Alejandro Bongiovanni y propone eliminar los requisitos de título, matrícula y controles formales para ejercer como corredor. La iniciativa generó un fuerte rechazo en el sector.
En sintonía con la agenda de desregulación promovida por el Gobierno nacional, el diputado del PRO Alejandro Bongiovanni presentó un proyecto de ley que propone liberar por completo el ejercicio de la actividad inmobiliaria en Argentina. La iniciativa, denominada “Ley de libertad inmobiliaria”, busca habilitar a cualquier persona a operar como corredor sin necesidad de título universitario, inscripción en registros o pertenencia a colegios profesionales.
El texto también plantea suprimir los aranceles mínimos obligatorios en las comisiones y anular la facultad de los colegios de sancionar a quienes ejerzan sin habilitación. Según el legislador, la intermediación debe considerarse una actividad comercial, tal como sucede en países como España o Estados Unidos, y no una profesión regulada.
La propuesta fue rechazada de plano por la Cámara Inmobiliaria Argentina. Su presidenta, Nancy Vieitez, advirtió que la eliminación de regulaciones podría dar lugar a una mayor cantidad de fraudes, fomentar la competencia desleal y deteriorar la calidad del servicio ofrecido al consumidor. En contraposición, la entidad presentó una alternativa que incluye un registro único de alcance nacional, mecanismos de colaboración entre agencias y la creación de agentes auxiliares bajo supervisión profesional.
Aunque el Gobierno aún no presentó un proyecto propio, desde principios de año trascendió que evalúa medidas en la misma línea. El debate, que divide aguas entre quienes apuestan por una mayor apertura del mercado y quienes sostienen la necesidad de controles, promete escalar en las próximas semanas.