En el Monumento a la Madre, un espacio que representa el vínculo más puro entre madre e hijo, culminó una semana en la que la promoción de la lactancia materna fue prioridad, incluyendo charlas en las Saps y caminatas. La actividad contó con la participación de agentes sanitarios, obstétricas y personal de salud que dialogaron con los vecinos sobre la importancia de la alimentación natural por excelencia.
La Municipalidad de Corrientes culminó este domingo, en el Monumento a la Madre, una intensa agenda de actividades en el marco de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que se celebra del 1 al 7 de agosto, y este año lo hace bajo el lema “Priorizando la lactancia materna, creando sistemas de apoyo sostenibles”.
El domingo, el evento comunitario “Mate cocido, teta y torta frita” buscó unir la promoción de la lactancia con las tradiciones correntinas, como símbolo de cuidado, cultura e identidad.
La directora de Maternidad e Infancia, Clara Aquino, explicó que: “una forma de apoyo sostenible es culturizar la lactancia materna, integrarla a nuestras costumbres y nada mejor que acompañar la teta con mate cocido y torta frita, en este monumento que tanto significa para Corrientes”.
Al mismo tiempo, Aquino subrayó la importancia de mantener políticas que faciliten el amamantamiento: “El apoyo sostenible no es solo del equipo de salud que atiende el embarazo o al recién nacido; incluye a todo el sistema, desde las licencias por maternidad hasta los espacios amigos. En el municipio tenemos tres horas de franquicia hasta que el bebé cumple un año, pero en otros ámbitos todavía es sólo una hora, y eso es insuficiente para acompañar a un recién nacido”.
“Este año también sumamos la rotación de diez obstétricas por el Banco de Leche Humana, un paso fundamental para garantizar la alimentación de los bebés que lo necesitan”, agregó Aquino.
ESFUERZO SOSTENIDO
Por su parte, la directora de Salud de la Mujer, Beatriz Burgos, destacó que la promoción de la lactancia es un esfuerzo sostenido todo el año. “Es la alimentación natural por excelencia. Desde el control prenatal trabajamos para que, después del nacimiento, los niños sean amamantados. Incluso fomentamos la donación de leche humana y la respuesta de las embarazadas ha sido muy buena”.
Asimismo, Burgos resaltó el papel de los agentes sanitarios: “Son un eslabón clave. Buscan a las embarazadas que no se acercan a los controles y las traen para que reciban atención, vacunas y consejería. Nos da tranquilidad ver que las madres se sienten respaldadas y que logramos nuestro objetivo: que cada bebé reciba el mejor inicio en la vida”.
Durante toda la semana, las propuestas organizadas por la Secretaría de Salud municipal, incluyeron disertaciones, talleres y acciones en distintas Salas de Atención Primaria de la Salud (SAPS), además de actividades abiertas a toda la comunidad, articuladas con el Gobierno provincial y un reconocimiento de la Legislatura por la labor de los Centros de Desarrollo Infantil (CDI), que desde 2009 marchan cada año por la calle Junín para visibilizar la lactancia.
Por lo tanto, el cierre de la Semana Mundial no implica el fin del trabajo. “Este es un compromiso permanente —coincidieron las funcionarias— porque creemos que la lactancia materna es el motivo por el que la humanidad ha sobrevivido millones de años. Es el primer acto de amor y salud hacia un hijo”.