La universidad implementará medidas de ahorro y advirtió sobre el impacto en becas, mantenimiento edilicio y actividades académicas. La convocatoria a movilizaciones y un paro nacional reflejan la tensión en el sistema público.
La Universidad de Buenos Aires (UBA) confirmó que pondrá en marcha un plan de restricción presupuestaria luego del veto presidencial a la ley de financiamiento universitario. Las autoridades señalaron que la medida afectará el uso de energía, las becas de investigación y el mantenimiento de edificios, generando un escenario crítico para la finalización del año académico.
En conferencia de prensa, la UBA alertó que la ausencia de actualización presupuestaria crea un vacío legal que dificulta la planificación de actividades académicas, científicas, sanitarias y de extensión. Ante esta situación, la universidad llamó a legisladores y a la sociedad a respaldar la continuidad de la norma y anunció una movilización coincidiendo con la discusión del Congreso.
Los gremios docentes y no docentes se sumaron al reclamo y confirmaron un paro nacional de 24 horas para el viernes 12 de septiembre, junto con una nueva Marcha Federal. Los sindicatos advirtieron que la falta de presupuesto actualizado provoca renuncias y pérdida de profesionales, poniendo en riesgo la estabilidad del sistema universitario público en todo el país.