Anoche, personal de la Comisaría Segunda de Barranqueras fue alertado sobre una moto abandonada en la intersección de las calles Irigoyen y Miguel Cané. Al llegar al lugar, los agentes constataron que se trataba de una Honda Wave blanca, sin plásticos frontales y con el sistema de encendido dañado.
Tras verificar los números de motor y chasis, determinaron que el rodado tenía pedido de secuestro activo por una causa de robo denunciada el 10 de noviembre en jurisdicción de la Séptima Metropolitana.
La moto fue trasladada a la unidad policial correspondiente por disposición del fiscal en turno, quedando a resguardo para su posterior restitución a la propietaria.
