La empresa negó fallas en la potabilización y aseguró que no existen reportes oficiales de intoxicaciones vinculadas al agua. Atribuyó los reclamos a desinformación difundida en redes sociales.
En las últimas horas, una denuncia difundida a través de redes sociales y cadenas de mensajería generó preocupación al advertir sobre una presunta falta de insumos en SAMEEP y un supuesto impacto sanitario en distintas localidades, con una “explosión de casos de intoxicación por un virus del agua”.
Ante esta situación, el gerente de SAMEEP, ingeniero Edgardo Altamirano, negó de manera categórica la veracidad de esos mensajes y aseguró que no existe desabastecimiento de insumos ni fallas en el tratamiento del agua potable. “Los recursos están y nosotros estamos constantemente monitoreando la calidad del servicio”, afirmó.
Altamirano remarcó además que la empresa no recibió reportes oficiales que confirmen cuadros de intoxicación asociados al consumo de agua. En ese sentido, explicó que el control sanitario se realiza mediante análisis permanentes en plantas potabilizadoras, cisternas y a lo largo de todo el sistema de distribución.
“El agua debe mantener niveles adecuados de cloro residual durante todo su recorrido. Ese cloro mata todo virus y bacteria que pueda llegar a tener el agua, incluso ante roturas de caños o ingreso de agua de napa”, detalló el funcionario. También indicó que, ante reclamos puntuales, SAMEEP envía personal técnico para analizar el agua en los domicilios.
Respecto a la baja presión registrada en Resistencia y otras localidades, Altamirano explicó que responde a múltiples factores, entre ellos cañerías antiguas con roturas, trabajos eléctricos, paradas del sistema y el aumento del consumo propio de la temporada de verano.
Sobre el uso de bombas particulares conectadas a la red, advirtió que no es una práctica recomendable, ya que disminuye la presión general y puede generar succión de agua no tratada. No obstante, reiteró que el cloro residual sigue funcionando como barrera sanitaria.
Finalmente, se refirió a los reclamos por la menor frecuencia de distribución mediante camiones cisterna, y explicó que la empresa redujo ese esquema para disminuir costos operativos y priorizar el uso de unidades propias. “Lo ideal es que la provisión sea por cañería y no por camiones”, sostuvo, aunque reconoció que la alta demanda y las limitaciones del sistema generan dificultades en algunos sectores.